Uno de los elementos que podemos tener en cuenta a la hora de contratar una agencia de publicidad Bilbao es la visualización de sus trabajos previos, lo que nos permitirá saber si están en la capacidad de hacer lo que nosotros necesitamos, así como verificar los criterios que utilizan para diseñar las campañas publicitarias.
Pero poco nos sirve tener esta posibilidad si no sabemos qué debemos evaluar en el catálogo que nos presenten, puesto que en el mejor de los casos, simplemente podremos aportar una valoración en cuanto a la estética, sin tener en cuenta el resto de las características que influyen en una buena publicidad.
Y para evitar que esto nos ocurra, nos convendrá saber apreciar detalles como el uso de los negativos o espacios en blanco de una imagen. En este sentido, un espacio negativo es todo aquello que rodea y atraviesa la imagen, el cual en teoría, constituye una zona de descanso para la vista, por lo que su aprovechamiento debe realizarse de una forma muy sutil.
Esto es justamente lo opuesto a lo que hacen aquellas personas que crean una presentación en PowerPoint cargada de texto, imágenes, logos y demás detalles, complicando la lectura y la concentración de la audiencia. De la misma manera, cuando se diseña la publicidad gráfica puede cometerse el error de agotar al público con el exceso de elementos.
¿En qué me beneficia reservar el área negativa?
La finalidad del área en blanco es hacer más sencilla la lectura del público, creando para él una publicidad ordenada, atractiva y en la que se pueda apreciar fácilmente la jerarquización de los elementos que la componen.
En virtud de ello, el aprovechamiento de este espacio nos permitirá enfocar la atención del usuario en lo que a nosotros nos interesa, quitándole relevancia a aquello que debe estar presente sin imponerse por encima de lo principal. Además nos da la facilidad de expresar un mensaje complejo de una manera sencilla, tal y como se logra a través del diseño minimalista.
Si quieres evitar que tu campaña publicitaria resulte asfixiante para el público, la próxima vez que tu agencia de publicidad te presente un catálogo de alternativas o elabore una propuesta publicitaria para ti, presta atención al aprovechamiento del espacio negativo.